Hoy voy a hacer leña del árbol (más bien arbusto, o incluso herbácea) caído. Me gustaría dejarlo hecho astillas. Porque se lo merece. Por el aburrimiento. Por la reiteración. Por lo “salada” de la afición...El árbol caído, obviamente, es la Roja, también llamada “selección española”. Ese ente que cada dos años va a un campeonato internacional y, según lo que dicen algunos, fracasa.
Suele haber dos variantes en sus fracasos: o bien van de favoritos, o bien van sin aspiraciones, como este año, hacen un buen partido contra una campeona de todo como Ucrania y vuelven a ser favoritos... el resultado el mismo: fracaso, fracaso fracaso.
Hay varios detalles que llaman mi atención:
Lo primero, la ausencia de crítica al seleccionador. Si en vez de ser Aragonés fuera Clemente, ya lo habrían ahorcado de la bandera española de Colón... pero bueno, es lo que tiene ser de Madrí... Ayer, pone a Raúl, que está más acabado que Axl Rose, en vez de sacar a Iniesta o a Reyes, por poner un ejemplo, mucho más rápidos y eficaces.
La segunda: el encumbramiento absurdo de ciertos jugadores. Léase Fernando Torres, un tío que lo más que ha hecho en la vida es marcarle goles al Barça y tener un peinado muy guay tío... Mira que es nefasto el cabrón, que siempre hace un regate de más, falla goles cantados y, con un equipo encerrado, es incapaz de tocar bola. Otro Joaquín, un timo absoluto. Chupón e ineficaz. Y Raúl, claro, el eterno capitán. El tío que se levantó un día y había olvidado cómo se jugaba al fútbol...
La tercera: la prensa. Las pajas mentales fueron absolutas tras el partido contra Ucrania (por cierto, cuartofinalista). “somos los mejores”, “el mejor centro del campo”, “Jugamos al ataque”, etcétera. Se creó un estado de ánimo en el que, incluso los más escépticos (entre los que me incluyo) tenían una cierta esperanza de que llegaran a cuartos por lo menos... Pero bueno, ahora tocan las elecciones del Madrid, la liga otra vez, y todo olvidado... hasta dentro de 2 años (si se clasifican para la Eurocopa, claro). La prensa deportiva es lo que es, tienen que vender humo...
La cuarta: la afición. Y es que me revuelve el estómago ver a gente con pelucas rojigualdas, vestidos de toreros, gu
ardias civiles y todo los símbolos de la España profunda imaginables. Todos unidos. Todos en comunión, con el puto “A por ellos oeoeoeoe”. Si es que los españoles tenemos un salero... Enseguida nos emocionamos y nos unimos en nuestra diversidad... Vergüenza ajena me produce ver a Angels Barceló desde Colón 2 horas antes, o el borreguismo general de las masas rojigualdas... Por ellos es por los que más me alegro de la eliminación... a buscar otros ídolos o a suicidarse, no tenéis otro remedio... eso os pasa por leer el As o el Marca y creéroslo, en lugar de leer libros...
En fin, que estamos hasta los cojones del fútbol y de la roja. Ahora el consuelo que queda es que eliminen a Brasil y ganen el mundial o Ucrania o Portugal...
